Consideración especialísima requiere el paso de palio de María Stma. de las Angustias Coronada; el cual ha merecido repetidas veces el interés de algunas instituciones para exponerlo completamente montado en Sevilla (e incluso en Roma, en la emblemática Exposición "Sevilla, Aguja y Oro"). Su gran mérito estriba, además de en la Imagen que lo preside, en toda su armoniosa orfebrería y en el valor de sus bordados. El palio, el manto y el faldón delantero, todos del pasado siglo, son de las hermanas Antúnez se encuentran en perfecto estado de conservación gracias a la alta calidad originaria del oro empleado y a la reciente restauración realizada en los talleres de Santoja. Previamente, en la década de los noventa, se trabajó tanto la limpieza y como el pasado a nuevo terciopelo, verde oscuro, de los bordados.
El techo de palio, obra del genial D. Juan Manuel Rodríguez Ojeda lleva en su centro o gloria un medallón con las Tres Virtudes Teologales, rodeado de profuso bordado a base de cardos y rosas, con la particularidad de que algunas de ellas van desprendidas del terciopelo, dando una especial sensación de relieve. Por su parte, las bambalinas, de corte ondulado, de aspecto ligero y gracioso, constan de doble y diferente bordado por cada cara, aunque guardando el mismo estilo, quedando rematadas por un grácil fleco de bellotas que les proporciona una característica sonoridad al entrechocar con los varales. En la bambalina trasera aún puede leerse por su cara interna "Este paso lo regaló a Ntra. Sra. de las Angustias su fervoroso hermano Antonio Reverte. Año 1903".
El portentoso manto decimonónico que sobre terciopelo negro fuera realizado, según se desprende de las últimas investigaciones, por el taller de bordados Dª. Luisa Jiménez, de Castilleja de la Cuesta; aunque hay otros estudiosos que lo siguen atribuyendo a las Hermanas Antúnez, emplea en sus bordados los mismos recursos decorativos, si bien agranda el trazado de las hojas e incluye, en su centro, dos ángeles sosteniendo el anagrama de María timbrado por corona real. Dos veces ha sido restaurada esta obra; la primera en los años cincuenta del siglo XX, en la que el color del terciopelo pasó a ser el verde; y la segunda en 1992, en la que la orla exterior original es sustituida por otra de mayor envergadura según diseño de Fernández y Enríquez. Fue costeado por suscripción popular, en la que las aportaciones fueron tales que hicieron posible también la realización del magnífico estandarte de la Hermandad. En este sentido, para el L Aniversario de la Coronación de la Madre de Dios en Alcalá del Río, se ha procedido a la limpieza íntegra de esta joya del bordado sevillano, gracias a la generosísima aportación de los Hermanos que, de igual forma a la acción de 1996, los donativos han sido tal que ha permitido la realización de un nuevo manto de camarín bordado por Dña. Genoveva Rodríguez sobre tisú de plata blanco, para estrenar en la primera salida procesional de nuestro pueblo tras sufrir la pandemia, el 9 de octubre de 2021.
De similar estilo, sobre terciopelo verde oscuro y enriquecido con piedras preciosas, es la saya procesional del Jueves Santo, obra de Juan Manuel Rodríguez Ojeda fechada en 1909 y que en aquella época tuvo un coste de 27.000 pesetas (fue donada por D. Antonio Velasco); restaurada en su totalidad el pasado año 2021 por el taller de Mariano Martín Santoja.
En cuanto a la orfebrería, ninguna pieza desmerece con respecto a los bordados. Los varales, de rico labrado en su totalidad realizados en los talleres Bautista, datan del año 1942 y fueron costeados por suscripción popular. De similar diseño y estilo son los candelabros de cola de guardabrisas, la peana, los respiraderos, la candelería, las jarras de entrevarales (siendo estas una de las primeras obras que se realizaron en los Talleres de Orfebrería Villareal -fundados en 1954- para una Corporación cofrade), dos ángeles portando sendos faroles que se colocan entre las varas que flanquean la peana y el llamador; obras éstas todas de Villareal, aunque de época posterior, así como la Virgen de los Reyes, en plata con coronas de oro, que preside el frontal de la candelería. Pero de entre toda la orfebrería del paso, merece especial mención la simpar corona de oro, perlas y esmeraldas con la que fue coronada la Virgen de las Angustias en 1971, una auténtica y originalísima joya, realizada también por Orfebrería Villareal.
Va la Señora sobre peana preciosista ricamente cincelada en estilo plateresco, con querubines y ángeles que portan el anagrama de la Virgen María; sustituye ésta a la anterior de plata, del siglo XIX, cuyo uso está cedido a la Hermandad de Jesús Nazareno para la Santísima Virgen de la Esperanza de la villa alcalareña.
Aún siendo portado a hombros de Hermanos Nazarenos el paso de palio, la forma ancestral y sello de esta Hermandad, lleva la parihuela del paso destacados respiraderos y maniguetas cincelados por Orfebrería Villarreal en 1984. Destacan en éste hermoso conjunto de
querubines las cartelas que escenifican diversos misterios del Santísimo Rosario.
En la actualidad todo el conjunto se encuentra totalmente restaurado, realizándose estos trabajos de cara al L Aniversario de la Coronación de María Santísima de las Angustias, donde nuestra Madre procesionaba de forma extraordinaria el 16 de octubre por esta efeméride, siendo el primer paso de palio en procesionar en la Diócesis de Sevilla tras la pandemia.