ACTUALIDAD

Recordemos aquellos que han caminado antes que nosotros, que nos han acompañado, nos han dado la vida; y comprendamos que no estamos solos, que nuestras raíces son profundas.

Con Sta. María de las Angustias alcanzaremos el Cielo nuevo, la Tierra Nueva y Hermosa de Dios. Ella nos llevará donde está el Amor que nos creó y el Amor que nos espera. Pidamos al Stmo. Cristo de la Vera-Cruz que nos conceda la Gracia de la Esperanza y de la apreciación de cuáles son las luces que nos acompañarán en el camino.

Celebremos ahora en la Fe, la belleza de Dios en el hermosísimo rostro de Nuestra Señora, que se muestra a los pies de su BENDITO HIJO, en la sobriedad del negro liso , con terno de terciopelo  dónde se resalta su hermosura con rostrillo y pecherín en antiguo encaje tipo "Princesa" de técnica mixta y punto de gasa con diseño floral.

En su angustiado corazón, puñal en plata sobredorada (s. XVIII) ; en su pecho, prendedor de lazada de oro de Anita Ojeda Bernal (q.e.p.d.) , donada en su memoria por sus hijos Alejo y Ana María , y medalla ovoide con el anagrama de la Virgen y un corazón traspasado de dolor también en oro de ley. Porta en sus amorosas manos, antiguo pañuelo de encaje de Bruselas, rosa de pasión, ajustador en oro y rosario de filigrana cordobesa en plata sobredorada.

Ciñe su purísima cintura, cíngulo de cotilla en oro de realce y cordón dorado. Sobre sus sagradas sienes, ráfaga en plata sobredorada.

¡Oh, Virgen de las Angustias, danos siempre tu Amor, que con él seremos felices en la Vida y en la Eternidad!

Amén.